Italia no es un país para jóvenes

 


 El 95% de los nuevos empleos se destinan a personas mayores de 50 años, mientras que las nuevas generaciones quedan al margen o huyen al extranjero.

Cada mes, cuando se publican los nuevos datos de empleo del ISTAT, el gobierno celebra cifras crecientes y récords históricos. Pero detrás de esta narrativa optimista se esconde una realidad muy diferente: el empleo está creciendo, sí, pero casi exclusivamente para los mayores de 50 años, mientras que las nuevas generaciones siguen manteniéndose al margen del mercado laboral. En febrero de 2025, las personas empleadas en Italia alcanzaron un máximo histórico de 24,3 millones, con un aumento de 47 mil unidades en comparación con el mes anterior. Pero si se observa la composición de estas cifras, el panorama cambia radicalmente: el 95% del crecimiento se refiere a los trabajadores mayores de 50 años. En el último año, de 567 mil nuevos empleados, 542 mil pertenecen a este grupo de edad, mientras que los trabajadores entre 25 y 34 años han disminuido en 10 mil unidades y los de entre 35 y 49 en 17 mil. El único signo positivo entre los jóvenes se refiere a los menores de 25 años (+52 mil empleados), pero a menudo con contratos precarios y mal pagados. 

Esta no es una tendencia repentina, sino el resultado de veinte años de transformaciones en el mercado laboral, determinadas en gran medida por el envejecimiento de la población y las reformas de las pensiones, en particular la reforma Fornero de 2011, que elevó la edad de jubilación y bloqueó el relevo generacional. Desde 2005 hasta la actualidad, el número de personas empleadas de entre 50 y 64 años ha aumentado en 4,2 millones, mientras que el de los menores de 50 años ha disminuido en más de 3 millones. El mercado laboral italiano sigue una dirección clara: cada vez más trabajadores mayores permanecen activos, mientras que los jóvenes luchan por encontrar su lugar. Quienes no logran encajar en un mercado que no ofrece oportunidades se ven obligados a marcharse. Entre 2013 y 2022, 352.000 jóvenes italianos de entre 25 y 34 años han trasladado su residencia al extranjero, de los cuales más de 132.000 son titulados universitarios. 

 

El gobierno de Meloni insiste en presentar una imagen triunfal de la situación laboral, destacando cómo el número de trabajadores ha aumentado en más de un millón desde octubre de 2022, cuando había 23,2 millones de empleados, hasta los 24,3 millones actuales. El primer ministro habló de una Italia con "más personas empleadas que en la época de Garibaldi", sugiriendo que el mérito recae enteramente en el actual ejecutivo. Sin embargo, las cifras revelan una historia diferente. La tendencia al crecimiento del empleo comenzó en el segundo semestre de 2021, mucho antes de que el gobierno de Meloni asumiera el cargo, y estuvo impulsada principalmente por la recuperación pospandemia. Además, como se desprende de los datos del ISTAT, el llamado "boom del empleo" afecta casi exclusivamente a los mayores de 50 años. No basta con decir que "el empleo está creciendo" si siempre son las mismas personas las que se benefician de él. El problema no es solo la cantidad de empleos, sino quiénes encuentran trabajo y quiénes, en cambio, siguen excluidos.


https://www.vdnews.it/lavoro/2025/04/02/news/l-italia-non-e-un-paese-per-giovani-18831430/

Publicar un comentario

0 Comentarios