Calle de dirección única, de Walter Benjamin, es un montaje cuyo origen está en 1924, fecha en la que Benjamin decidió reunir algunos aforismos y ensayos sobre tres temas principales: la situación económica de Alemania, previo a la Segunda Guerra Mundial, la rememoración de la infancia y la ciudad de París, antecedente de lo que sería el libro de los Pasajes. Noventa años después, las anotaciones de Benjamin siguen teniendo la misma vigencia en un mundo congelado en una crisis que pareciera ser la misma:
«Pobreza no es vileza». Está muy bien. Pero ellos sin duda envilecen al pobre. Lo hacen, y lo consuelan con ese refrán. Uno de esos refranes que se podían aceptar en otros tiempos, pero cuya fecha de caducidad llegó hace mucho. Igual que aquella frase tan brutal: «el que no trabaje, que no coma». Cuando había trabajo para dar de comer a la gente, existía también una pobreza que no envilecía a quien la padecía si su causa había sido una mala cosecha u otra desgracia. Pero sí que envilece esa miseria en la nacen millones de seres humanos y en la que acaban cayendo centenares de miles de personas que empobrecen. Hoy la suciedad y la miseria crecen en torno a ellos como muros construidos por manos invisibles.
Recordemos que Walter Benjamin, junto con otros miembros de la Escuela de Frankfurt como Adorno y Habermas, replantearon la idea del marxismo y trasladaron el papel histórico del proletariado a los estudiantes. Hay, en estos textos de Benjamin, un destino histórico por cumplirse. En los fragmentos se pueden leer, incluso, antecedentes a las preocupaciones ambientales que nacerían en los ochenta"
30 jun. 2015 - La prosa breve de Walter Benjamin hace mucho tiempo que forma parte del ..... Solo un cálculo que admita encontrar en la decadencia la única ratio del estado ..... el lugar donde guardo mis documentos, las direcciones de.
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