Contexto e influencias de C.G Jung

 


6. El inconsciente abisal de C.G Jung

6.1 Contexto e influencias de C.G Jung

Jung creía que todas las teorías psicológicas son reflejo de la biografía personal de sus creadores. Los grandes intereses de Jung hacia la arqueología, la zoología, lo esotérico, etc, le llevaron a la psiquiatría como plataforma desde la cual aproximarse a sus diferentes e interrelacionadas áreas de interés (Matton MA, 2005, pp 98 y Douglas C, 1999, a, pp 39).

Las teorías de Kant, Goethe, Schiller, Hegel y Nietzsche tuvieron especial influencia en la formación del modelo jungiano, a través de la lógica dialéctica y el juego de opuestos, pues para Jung la vida se organiza por medio de polaridades. Se le podría considerar como un neo-kantiano, ya que amplía el pensamiento de Kant al agregarle el sentido de la realidad de la historia y la cultura; pero por otro lado tiene mucho más en común con Goethe, en cuanto a similitud con sus ideas y visión polar del mundo, y por la relación del sí-mismo (masculino) con lo femenino.

Las ideas de Jung sobre el inconsciente colectivo, sus arquetipos y en especial el complejo Ánima-Ánimus, se inspiró parcialmente en la filosofía de la naturaleza de F.W. von Schelling (1775-1854), con su concepto del alma del mundo y la bisexualidad fundamentalmente del ser humano (Douglas C, 1999, b, pp 57).

Jung retomó estas ideas normativas y las engarzó dentro de las teorías de Carl Gustav Carus (1789-1869) y Arthur Schopenhauer (1788-1860), como precursores fundamentalmente de él. Del modelo tripartito del inconsciente de Carus, Jung prefigura los conceptos de lo inconsciente arquetípico, colectivo y personal. Carus describió en lo inconsciente la presencia de una función creativa, autónoma y sanadora, concibiendo la vida psíquica como un proceso dinámico en el que conciencia e inconsciente se autocompensan mutuamente. Las teorías de Schopenhauer sobre las cuatro funciones, con la polaridad pensamiento/sentimiento y la revalorización de la introversión, influyeron en la teoría tipológica de Jung. Schopenhauer sintetizó y esclareció la visión neoplatónica de los filósofos románticos sobre los modelos primigenios, inspiradores de la teoría de los arquetipos jungianos.

No se debe dejar de lado la influencia que sobre Jung también tuvo la obra de su conciudadano Jacob Bachofen (1815-1887). Conocido historiador y académico interesado en los mitos y el significado de los símbolos de los que subrayó su importancia filosófica y religiosa. J. Bachofen y posteriormente Erich Neumann, adoptaron un desarrollo evolutivo de la conciencia que a Jung le fue muy interesante, por cuanto entendían que la historia de la humanidad evolucionó desde un período hetérico, indiferenciado, pasando por una época matriarcal antigua, para llegar a un tiempo de desestabilización, seguido de un patriarcado que reprime todo recuerdo de eras anteriores (Bachofen J, 1992, pp 48 y Neumann E, 2009, pp 228).

Jung recurrió a Bachofen y a Nietzsche para modelar su propio sentido de la historia y para dilucidar su teoría de los arquetipos. Jung se inspiró en el énfasis de Nietzsche sobre la importancia de los sueños y la fantasía; así como el significado concedido al papel de la creatividad y el juego para un desarrollo sano. Pero por encima de todo, impactó a Jung la profunda comprensión que alcanzó Nietzsche, de las oscuras sombras y fuerzas irracionales que subyacen en la humanidad y el deseo de lucha contra ellas; describiéndolo como lo dionisiaco y que Jung lo llama la sombra personal y colectiva. La descripción de Nietzsche de la sombra, la persona, el superhombre y el viejo sabio fueron adoptados por Jung como figuras arquetípicas específicas (Douglas AD, 1999, pp 81).

El libro de Jung, que preanuncia la ruptura con Freud, (Símbolos de

transformación) revela la influencia de la obra de Justinus Kerner (1786-1862) y su

estudio de una paciente suya: la vidente de Prevorst, con sus habilidades mitopoéticas (Kerner J, 2004, pp 12).

Dentro del marco esotérico, su madre tuvo gran relevancia. No sólo le inició en lo oculto y en lo paranormal, sino también en las religiones orientales, pues desde temprana edad le solía leer relatos religiosos orientales. En su época adulta, la influencia provenía de Toni Wolf, cuyo padre era un respetado sinólogo; H. Von Keyserling, fundador de la Escuela de Sabiduría de Darmstadt y R. Wilhelm, estudioso sinólogo alemán y misionero en China (Spielgelman JM y Miyuki M, 1988, pp 210-230). Jung utilizó su conocimiento de la filosofía oriental para situar a la psicología analítica en un contexto comparable con el de las grandes filosofías de Oriente.

Jung tenía referencias de alquimia desde 1914, cuando H. Silberer aplicó la teoría freudiana al estado de la alquimia del siglo XVII; pero fue cuando elaboró el comentario para el texto alquímico chino El secreto de la flor de oro (1929), de R. Wilhelm, cuando realmente se interesó por la alquimia de la Edad Media europea. Su interés por la alquimia y por los primeros autores gnósticos continuó aumentando en la última etapa de su vida. Jung consideraba que la alquimia era un puente entre la psicología moderna y las tradiciones místicas cristianas y judías, que se remontan al gnosticismo. Aunque las teorías jungianas se deben a la tradición aristotélica ilustrada de los científicos racionalistas, y por lo tanto, se apoya en una ciencia empírica, también bebe de fuentes más profundas, donde lo religioso, chamanismo y mística se incardinan en el conocimiento moderno de la mente.

Esta corriente jungiana valora lo imaginal poniendo énfasis en la búsqueda y evolución interior; además valora el vínculo existente entre todos los seres y da a la

psicología analítica un papel estable en la creación de una ciencia postmoderna de cuerpo-mente-alma.


https://1library.co/article/contexto-influencias-de-jung-el-inconsciente-abisal-jung.z3e9ljeq

Publicar un comentario

0 Comentarios