Muerte de un ciclista 1955 Juan Antonio Bardem


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Texto: Ercilia M. Perriere

Muerte de un ciclista (1955) es la denuncia del director español Juan Antonio Bardem al gobierno franquista, sobre la falsedad social, delineando el retrato de la clase alta complaciente.

Una pareja adúltera, conformada por María José (Lucia Bosé) y Juan (Alberto Closas) accidentalmente atropella a un ciclista y, temiendo que descubran su secreto, dejan al hombre herido librado a su suerte. Cuando regresan a Madrid, se enteran a través de los periódícos de que el ciclista ha fallecido. La pareja paga un terrible precio por su engaño.

La culpa comienza a roer en sus conciencias, especialmente en Juan, que también está experimentando un conflicto con una joven estudiante sobre un tema ético en la universidad donde ejerce como profesor, revelando al resto del alumnado. María José, una mujer de la alta buguesía, sin embargo, actúa fría y despreocupada por las implicaciones morales que supone el haber matado a un hombre, ya que teme que su relación sea descubierta y que esa repercusión desbarate su posición social junto a su adinerado esposo y hombre de negocios Miguel (Otello Toso). Las cosas se complican aún más cuando la pareja descubre que un miembro de su círculo social, un parásito y crítico de arte, Rafa (Carlos Casaravilla), parece saber algo acerca de su romance y del crimen y este no duda en chantajearlos.

Durante el desarrollo de la trama vemos la transformación de Juan, que tras el incidente, renacen sus ideales perdidos. Juan, acosado por las protestas de los estudiantes, le dice a su alumna Matilde que está renunciando a su trabajo de enseñanza. Matilde le perdona y trata de ayudarlo, pero la muerte del ciclista pesa sobre la conciencia de Juan. Él tratará de convencer a María de rendirse, pero en una última cita para discutirlo, visita el sitio del accidente y ella lo atropella con el coche. María, ahora en la carrertera, con el fin de evitar colisionar con otro ciclista, tiene un accidente y muere.

El director mantiene un nivel intenso de suspenso examinando no sólo el peso de la culpa, sino también una sociedad española donde personas como Juan y María José operan por encima de la ley, en una burbuja de riqueza y privilegios, mientras nadie se preocupa por lo que les pasa a los pobres, como a la familia obrera del ciclista atropellado que viven en la penuria, luchando por sobrevivir sin que la policía se ocupe de encontrar al asesino. Estos temas están más articulados en una partitura musical inolvidable por Isidro B. Maiztegui.

El filme conserva un estilo muy influido por el neorrealismo italiano, Bardem fue uno de los directores más importantes de España que supo captar la atención del público internacional. Esta película fue la ganadora del Premio de la Crítica Internacional en el 1955 en el Festival de Cine de Cannes, pero Bardem no pudo asistir porque Franco lo tenía encarcelado por motivos políticos. Pero la comunidad internacional de cine ejerció una gran presión sobre el régimen, logrando su libertad. En 1958 Bardem fundó una productora independiente y bajo su dirección, invitó a su amigo Luis Buñuel, después de un largo exilio, para regresar a España para realizar Viridiana (1961). Gran película de Buñuel que tambíen fue prohibida en España y la compañía de producción fue cerrada por los fascistas, pero Bardem logró sobrevivir apenas en el clima represivo de España al hacer coproducciones con otros países europeos.

El cine español durante el franquismo era una industria ahogada y estéril, mantenida bajo estricto control gubernamental. Bardem fue uno de los pocos valientes realizadores en cuestionar la opresión psicológica y política del momento y hacer frente a las realidades de la vida contemporánea.

https://elladrondebicicletas.wordpress.com/2013/01/31/muerte-de-un-ciclista/

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