Joseph Almudéver, el último voluntario

 RETRATOS. Despedida del luchador que se alistó en las "Brigadas Internacionales" durante la Guerra Civil Española. Comunista hasta el final de sus días, muere a los 101 años

Pasquale D'Aiello

EDICIÓN DE 30.05.2021 PUBLICADO 30 / 05.2021

 

Joseph Almudéver (Pasquale D'Aiello, fotograma del video 2012)

Imposible saber cuál fue su último pensamiento antes de cerrar los ojos para siempre pero es casi seguro que se dijo a sí mismo: he estado en las Brigadas Internacionales. El 23 de mayo de 2021 falleció Joseph Almudéver, el último hombre de este planeta en poder decirlo. Para él fue un gran orgullo y quizás su único consuelo para esa maldita guerra perdida. Cuando el general Francisco Franco llevó a cabo su golpe de Estado contra la República Española el 18 de julio de 1936, desencadenando la guerra civil, José era solo un niño, aún no había cumplido los 17. Para incorporarse al ejército republicano tiene que mentir sobre la edad y participar como voluntario, siendo ciudadano francés de nacimiento y lo consigue incluso antes que su hermano Vincent un par de años mayor (aún vivo). Después de una pausa por lesión,

ENTRE 1936 Y 1939Aproximadamente 50.000 personas, provenientes de más de cincuenta países, se ofrecieron como voluntarias para estas formaciones militares que constituyen la primera y más fuerte columna vertebral del ejército republicano que permitió enfrentar a las fuerzas predominantes franquistas, apoyadas militarmente durante tres años por Hitler y Mussolini. La historia de las Brigadas Internacionales continúa la tradición romántica de héroes que abrazan las causas de los pueblos oprimidos y son parte del arco más amplio del garibaldinismo. Aunque fueron organizados por el Komintern y la mayoría de sus miembros eran de fe comunista, como lo fue José hasta el final de sus días, también reunieron adhesiones de exponentes de otras culturas políticas, desde socialistas a republicanos, incluso a liberales y solitarios. aventureros. Su trabajo dentro del frente republicano no podía dejar de verse afectado también por la difícil relación con la muy fuerte cultura anarco-libertaria en España y por las obsesiones estalinistas, pero su eficacia organizativa y militar dio esperanza a las fuerzas republicanas y fue el más alto grado de respuesta a la amenaza fascista. Sus hazañas han sido descritas y legendarias por los cuentos de Hemingway, por las fotos de Robert Capa, Gerda Taro y Chim, por los poemas de Auden, Cornford y Hikmet, por las películas realizadas por Ivens, Bresson, Buñuel, Dos Passos y Orson Welles.

HABLAR CON JOSEPH sobre la guerra en España fue una experiencia inmersiva que lo abarcó todo. Recordó fechas y lugares con sorprendente precisión. Hablaba sin cesar, como quien es consciente de que no le queda mucho tiempo pero no quiere que se pierdan sus recuerdos. Mientras hablaba seguía indignado contra las democracias occidentales que no ayudaban a España, seguía odiando a Franco, conmovido por sus compañeros muertos, reivindicaba sus elecciones de coraje. Pero fue su comportamiento al final de la guerra lo que le hizo comprender las cosas humanas.

Es enero de 1939, la guerra ahora está claramente perdida, los que pueden buscar refugio en Francia. José, tras recibir el saludo del jefe del gobierno republicano Juan Negrín en Barcelona, ​​consigue huir a Francia el 20 de enero. Tras unos días de estancia en Marsella le invade un profundo malestar y con una loca decisión se embarca en un barco inglés que el 5 de febrero le trae de vuelta a España en Valencia, justo a tiempo para presenciar el desmoronamiento definitivo del barco. República. No sin antes haber sufrido una última afrenta que le marcará de por vida. Es el 30 de marzo de 1939, último día de la República. Él y su familia están en el puerto de Alicante para intentar embarcar y salvarse, las tropas de Franco ya rodean el puerto,

EN DETERMINADO PUNTO Joseph comprende que no podrán embarcarse y para evitar ser reconocido como miembro de las Brigadas Internacionales decide arrojar su libro brigatista al agua. Cuando lo cuenta más de ochenta años después de los hechos, todavía tiene lágrimas en los ojos. La historia de Joseph dejó en claro que es al final del juego cuando entiendes el tipo de jugador. Era un luchador total, un hombre incapaz de rendirse porque no sabe rendirse, porque no está bien rendirse a la opresión, era un verdadero "brigatista internacional", el último. Y cuando en muchos, muchos años se siga hablando de las Brigadas Internacionales, que se recuerde su nombre. Joseph Almudéver. Se lo merecía.
Las memorias de Joseph Almudéver fueron publicadas en Italia en 2017 por Edizioni Ets en la serie «Verba manent» (en la traducción de Ángeles Aguado López), con el título La Repubblica traicionada. Memoria de un miliciano y brigatista internacional en la Guerra de España.

*TARJETA. UN DOCUMENTAL SOBRE SU BIOGRAFÍA

Se titula "El primero será el último" (2021) y es el documental escrito por Pasquale D'Aiello y Mauro Manna (dirigido por Pasquale D'Aiello) dedicado a la búsqueda de los últimos voluntarios republicanos que lucharon en la guerra civil española. guerra.
Entre 2015 y 2018, los realizadores conocieron a ocho de ellos, entre los que destaca la empresa política y existencial de José Almudéver.

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